El voto joven en Honduras podría convertirse en un factor decisivo en las Elecciones Generales del próximo 30 de noviembre.

Aunque históricamente la participación juvenil ha sido menor en comparación con la de los adultos, los registros muestran que su presencia en el padrón electoral aumenta este año.

Para el proceso electoral de 2025, se estima que 2.3 millones de jóvenes estarán habilitados para ejercer el sufragio. Esta cifra convierte al sector juvenil en un bloque generacional, capaz de inclinar el resultado si algún candidato logra captar su respaldo.

El análisis realizado se basó en datos electorales del TSE y en información estadística del INE, aplicando una proyección lineal simple. El estudio contempla dos escenarios, uno pesimista, con una participación aproximada del 51% en ausencia de motivación política, y otro optimista, que eleva la participación a cerca del 58%, similar a la movilización registrada en 2021.

La brecha entre ambos escenarios supera los 160 000 votos potenciales, en un proceso electoral competitivo, esta diferencia podría marcar el punto decisivo entre la victoria y la derrota.