En un gesto de solidaridad ante la grave crisis humanitaria que atraviesa la Franja de Gaza, el gobierno de España ha coordinado el envío de más de 12 toneladas de ayuda alimentaria. Que incluyen más de 5,000 raciones de comida destinadas a paliar el hambre entre la población civil.
Las autoridades españolas han reiterado con firmeza su exigencia de que se garantice el acceso constante, sostenido y sin restricciones de toda la ayuda humanitaria, en particular la asistencia alimentaria, al interior de la Franja de Gaza.
La situación humanitaria que actualmente se desarrolla en Gaza ha alcanzado niveles absolutamente alarmantes, caracterizándose por un estado de hambruna generalizada que afecta de manera devastadora a toda la población civil.

ESPAÑA RESPONDE AL HAMBRE EN GAZA CON ENVÍO DE AYUDA DE ALIMENTOS
En este contexto, niñas y niños, incluidos recién nacidos, están perdiendo la vida a causa de la desnutrición severa y la imposibilidad de acceder a los mínimos alimentos necesarios para su supervivencia. Las familias gazatíes se ven obligadas a enfrentarse diariamente a condiciones extremas, en las que el simple acto de buscar comida se convierte en una acción desesperada que pone en riesgo su integridad física e incluso sus vidas.
Según datos alarmantes, se estima que aproximadamente 40.000 bebés y cerca de 100.000 menores de edad en la Franja de Gaza se encuentran actualmente en una situación crítica. Enfrentando un riesgo inminente de fallecimiento como consecuencia directa de la falta absoluta de alimentos.
Las raciones alimentarias enviadas desde la ciudad de Zaragoza, que ya han sido transportadas y almacenadas en territorio jordano. Serán distribuidas en la Franja de Gaza mediante una operación aérea que contempla el lanzamiento de la ayuda humanitaria a través de 24 paracaídas.
A este escenario de miseria se suma la persistencia de los bombardeos por parte de las fuerzas israelíes, ataques que han sido calificados por múltiples voces como acciones de carácter genocida, debido a su impacto desproporcionado sobre la población civil.
Los recientes ataques aéreos y ofensivas perpetradas por las Fuerzas de Defensa de Israel han provocado la muerte de al menos 86 personas palestinas, quienes fueron abatidas mientras intentaban acceder a puntos de distribución de ayuda humanitaria.
La mayoría de estos asesinatos se registraron en la zona de Zikim, donde civiles desesperados se congregaban con la esperanza de obtener parte de los escasos alimentos que logran ingresar a Gaza a través de los limitados convoyes de reparto autorizados.
Este trágico episodio evidencia el alto grado de vulnerabilidad al que está sometida la población gazatí, incluso en contextos donde deberían estar protegidos por el derecho internacional humanitario, como es el caso de la búsqueda de asistencia básica para sobrevivir.
Mientras las ofensivas aéreas israelíes continúan sin tregua, cobrando la vida de civiles inocentes, la hambruna avanza como una segunda arma silenciosa, matando por inanición a miles de personas que han quedado atrapadas sin medios para sobrevivir.

