Las autoridades de la Secretaría de Seguridad de Honduras tienen previsto llevar a cabo hoy martes la entrega y extradición a Costa Rica de Miguel Alfredo Erazo Lazo, hondureño acusado de delitos vinculados al narcotráfico en dicho país centroamericano.
Erazo, actualmente detenido en el centro penal de Támara en Francisco Morazán, será trasladado esta mañana desde dicho penal hasta el Aeropuerto Internacional de Palmerola, desde donde será llevado a Costa Rica.
El traslado contará con una importante presencia de seguridad, encabezada por elementos de la Dirección Nacional de Fuerzas Especiales (DNFE), y se realizará utilizando los vehículos conocidos como «Black Mamba».
El general Julio Romero Canales, director de Fuerzas Especiales, informó que «hoy será el traslado desde la Penitenciaria Nacional de Támara hacia Palmerola de Miguel Alfredo Erazo, solicitado en extradición.
La captura
La captura del individuo tuvo lugar el 15 de febrero de 2023 en Jutiapa, Atlántida, ubicada en la franja litoral atlántica de Honduras. En esta operación participaron efectivos de la Policía Nacional y sus distintas divisiones.
Luego de su detención, fue trasladado por vía aérea desde Atlántida hasta Tegucigalpa, donde permaneció en la base de Fuerzas Especiales, siendo presentado ante los medios de comunicación.
Asimismo, se llevaron a cabo las correspondientes audiencias requeridas por la ley, durante las cuales se le informó sobre la acusación en su contra.
El juez encargado del caso de extradición autorizó su entrega a Costa Rica el 21 de abril de 2023. Transcurrieron varios meses para coordinar y ejecutar el traslado hacia el país centroamericano.
La captura y posterior extradición de Miguel Alfredo Erazo Lazo desde Honduras a Costa Rica evidencian la cooperación interinstitucional y el compromiso con la justicia regional.
}Este proceso, iniciado tras su arresto en febrero de 2023, subraya la determinación de enfrentar cargos relacionados con el narcotráfico. Con la autorización del juez de extradición en abril del mismo año, se cierra un capítulo, enfatizando la importancia de la colaboración internacional en la lucha contra el crimen organizado.
