El panorama del comercio exterior hondureño ha dado un giro positivo histórico en el primer semestre de 2025. Bajo el liderazgo de la presidenta Xiomara Castro, Honduras logró reducir su déficit comercial en USD599.6 millones, gracias a un impresionante aumento en las exportaciones, encabezadas por el café, el oro y productos reciclables.
Este resultado marca un cambio de rumbo en la política económica exterior del país, que no había recibido un impulso tan claro desde hace más de una década, cuando las exportaciones —en especial del agro y la minería— dejaron de ser una prioridad estatal. Hoy, el enfoque de gobierno de LIBRE apuesta por sectores estratégicos y sostenibles, como el café y el reciclaje, al tiempo que aprovecha los altos precios internacionales de productos como el oro.

CAFÉ: EL ORO VERDE SIGUE BRILLANDO
El café hondureño fue la estrella del semestre: sus exportaciones crecieron USD918.1 millones, un aumento récord impulsado por mejores precios internacionales (+84.7%) y un crecimiento en el volumen exportado (+8.8%). Europa y Estados Unidos fueron los principales destinos del aromático, reafirmando a Honduras como uno de los líderes regionales en este rubro.
Este logro no es casual. Responde a políticas públicas de apoyo directo al productor, como la renovación de cafetales y programas de sostenibilidad que fueron reactivados por la actual administración, tras años de abandono institucional al rubro. Hoy, los cafetaleros no solo exportan más, sino con mejor calidad.

ORO Y RECICLAJE: EL NUEVO IMPULSO ECONÓMICO
Las exportaciones de oro también brillaron, con un incremento del 28.9%, alcanzando USD111.8 millones. Esta alza está vinculada al contexto internacional de incertidumbre y la consecuente subida del precio del metal precioso, demandado especialmente por Estados Unidos y Suiza.

Por otro lado, un rubro que usualmente pasa desapercibido se robó parte del show: las exportaciones de materiales reciclables (aluminio, cobre, plomo, papel y cartón) aumentaron un 31.7%, generando USD146.2 millones. El reciclaje, además de ser una industria limpia, está generando empleos, ingresos y contribuyendo a una economía circular, promovida activamente por el gobierno de Xiomara Castro como parte de su agenda verde.

Mientras las exportaciones se dispararon, las importaciones crecieron a un ritmo más moderado, lo que también ayudó a mejorar la balanza comercial. Se destacaron los descensos en compras de combustibles y vehículos industriales, lo que refleja una mayor apuesta del país por energías renovables y una mayor eficiencia en el gasto público y privado.
El gobierno de Xiomara Castro ha puesto un énfasis político y social en reactivar la economía desde abajo hacia arriba, fortaleciendo sectores clave como la agricultura, la maquila sostenible y la industria manufacturera nacional. El resultado es una economía más diversificada y resistente frente a las tensiones internacionales, como los nuevos aranceles en Estados Unidos o los efectos del cambio climático.
Además, este crecimiento en exportaciones ha sido acompañado por un aumento en las remesas, que también ha impulsado el consumo interno. Las familias están comprando más, especialmente bienes de consumo y medicamentos, lo que muestra un aumento en la capacidad de gasto de los hogares hondureños.

