El actual jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Roosevelt Hernández, reaccionó a las pretensiones oscuras y proselitistas de un grupo de generales retirados que integran la organización Defensores de Honduras, que buscan la desestabilización de la institución y el gobierno.

El suceso inició cuando estos últimos exigieron la destitución de Hernández, provocando una contundente respuesta del alto mando militar.

Durante un acto oficial transmitido por las Fuerzas Armadas al iniciar el mes de julio, Hernández rechazó las críticas y recordó el actuar de los exjefes militares cuando aún ejercían funciones en el brazo armado.

Los aludidos incluyen a Mario Raúl Hung Pacheco, Luis Alonso Maldonado, Isaías Barahona y Reynel Funes Ponce, todos antiguos jefes del Estado Mayor Conjunto.

Hernández reprocha a exjefes militares su inacción ante amenazas al territorio nacional

Hernández señaló que estos exjerarcas «ya no son militares». Afirmó que, aunque recibieron dignidad de la institución, ahora la “apedrean” por “ambiciones” e “intereses subjetivos”.

Recordó que fue subalterno de algunos de ellos y nunca cuestionó sus decisiones. “Hoy son ciudadanos como cualquier otro. No tienen derecho a atacar la institución que les dio dignidad y que todavía los sostiene”, expresó.

Hernández retó públicamente a los generales en retiro a debatir sobre moral y ética. Criticó especialmente a Hung Pacheco, lamentando que, a sus casi 80 años, use las Fuerzas Armadas con fines proselitistas, pese a haber sido recibido con respeto en la institución.

A Maldonado lo calificó como una persona “frustrada”, cuya carrera, dijo, fue perjudicada por quienes ahora son sus aliados.

“No entendemos realmente su personalidad. No está definida”, afirmó. Aseguró que ninguno de ellos tiene “moral, ética o política para pedir mi destitución”.

El ataque más fuerte fue dirigido a Barahona Herrera. Hernández lo acusó de ser un “destructor de familia” y de carecer de moral.

Sugirió que debió enfrentar un tribunal de honor mientras estaba en funciones. Lo retó a debatir públicamente para “quitarle la máscara” y lo acusó de actuar en defensa de intereses personales, no de la democracia.

Sobre Funes Ponce, Hernández recordó que “sale salpicado, sale mencionado” en medios y redes sociales.

En su cierre, reclamó a los cuatro exjerarcas no haber defendido el territorio nacional, en especial la costa atlántica y las desembocaduras de los ríos, a pesar de contar con recursos suficientes.

Finalmente, instó a los generales retirados a respetar el tiempo y espacio de las promociones actuales dentro de la institución.