En un paso histórico hacia la soberanía energética y la justicia social, el gobierno de la presidenta Xiomara Castro y la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), a través de la Licitación Pública Internacional LPI 1000-010-2021 para contratar hasta 1,500 MW de capacidad firme más un margen de reserva del 10% esto beneficiaría al pueblo con bajos costos por un periodo de 15 años.

Esta iniciativa, una de las más ambiciosas en la historia energética de Honduras, busca garantizar un suministro eléctrico estable, sostenible y asequible, rompiendo con el modelo de corrupción y abandono que caracterizó administraciones anteriores.

OBJETO DE LA LICITACIÓN: ENERGÍA ASEQUIBLE Y SOSTENIBLE PARA EL PUEBLO

El objeto principal de la licitación, conforme a los Términos de Referencia (TDR) aprobados por la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE) mediante las resoluciones CREE-19-2021, CREE-22-2024 y CREE-13-2025, y en cumplimiento con el artículo 35 del Reglamento de la Ley General de la Industria Eléctrica (RLGIE), es contratar hasta 1,500 MW de capacidad firme más un 10% de reserva bajo la modalidad Build, Operate and Transfer (BOT) por 15 años.

Esta contratación combina tecnologías renovables y no renovables, con una distribución de adjudicación de hasta un 76% no renovable y un mínimo de 24% renovable, siempre respetando los requerimientos de la distribuidora y el Plan Indicativo de Expansión de la Generación (PIEG).

El enfoque central es minimizar el costo de abastecimiento de energía y potencia firme, garantizando que las tarifas aplicadas a los consumidores reflejen los beneficios económicos de la contratación. Para proteger a los usuarios, cualquier costo que supere el 5% del valor de contratación estipulado no será reconocido en la tarifa final de la ENEE, con la evaluación del límite del 5% aplicada sobre la energía total anual. La licitación utiliza una subasta inversa por rondas sucesivas, un mecanismo transparente y competitivo que ha demostrado éxito en países como Guatemala, asegurando los precios más bajos del mercado.

ETAPAS DE ENTRADA: UNA INTEGRACIÓN GRADUAL Y ORDENADA

La licitación está diseñada para integrar la nueva capacidad energética de manera gradual, evitando sobrecargas en el sistema eléctrico y garantizando estabilidad. Las etapas de entrada de la generación, según los requerimientos de la distribuidora, son las siguientes:

• Segundo semestre de 2027: 800 MW (máximo 630 MW no renovable, mínimo 170 MW renovable).
• Primer semestre de 2028: 300 MW (máximo 290 MW no renovable, mínimo 10 MW renovable).
• Primer semestre de 2029: 400 MW (máximo 220 MW no renovable, mínimo 180 MW renovable).

Estas etapas reflejan una planificación ordenada que fortalece el Sistema Interconectado Nacional (SIN), promoviendo la diversificación energética y la resiliencia del sistema.

La modalidad BOT implica que los oferentes adjudicados serán responsables de la inversión, construcción y operación de las centrales generadoras durante 15 años, tras lo cual estas serán transferidas al comprador (ENEE). Los contratos incluyen opciones como contratos de opción de compra de energía, contratos de diferencia con curva de carga y contratos de energía generada, garantizando flexibilidad y eficiencia económica.

UN HITO EN LA HISTORIA ENERGÉTICA DE HONDURAS

La licitación de 1,500 MW es la más grande en la historia de Honduras y marca un antes y un después en el sector eléctrico.

“Estamos transformando el subsector electricidad con un enfoque de justicia social y sostenibilidad”, afirmó Wilfredo Flores, comisionado de la CREE, destacando la transparencia y competitividad del proceso.

Erick Tejada Carbajal, secretario de Energía y gerente general de la ENEE, subrayó que el lanzamiento, realizado el 23 de junio de 2025 en el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), invita a inversionistas nacionales e internacionales a participar en un proceso respaldado por garantías financieras de organismos multilaterales.

El gobierno de Xiomara Castro, entre 2022 y 2025 ha destinado aproximadamente 2,500 millones de lempiras a la modernización de la red de transmisión y distribución, incluyendo la construcción de nuevas subestaciones y la ampliación de líneas en regiones clave como Cortés, Atlántida y Olancho. Estas inversiones han permitido aumentar la capacidad instalada en un 15% desde 2022, pasando de 2,800 MW a 3,220 MW, según datos de la ENEE.

Durante los 12 años de gobierno del Partido Nacional (2010-2021), la inversión en el sector eléctrico fue insuficiente y mal gestionada. Según datos de la ENEE, se invirtieron aproximadamente 12,000 millones de lempiras en generación, transmisión y distribución, con un promedio anual de 1,000 millones de lempiras.

Gran parte de estos recursos se destinó a contratos térmicos con empresas privadas, como Lufussa y Enersa, que resultaron en tarifas altas y deudas acumuladas de 124 millones de dólares entre 2003 y 2005. La ENEE enfrentó pérdidas técnicas y comerciales de hasta el 30%, y la cobertura eléctrica en áreas rurales apenas alcanzó el 60%.

En contraste, en solo tres años y medio, el gobierno de Xiomara Castro ha invertido cerca de 7,500 millones de lempiras en el sector eléctrico, incluyendo 2,500 millones en infraestructura y 5,000 millones en proyectos de generación renovable y modernización de la ENEE. Esta inversión ha permitido reducir las pérdidas técnicas al 20%, aumentar la cobertura eléctrica rural al 75% y estabilizar las tarifas, que en 2025 se mantienen en un promedio de 159.82 USD/MWh, un 9.28% menos que en 2024.