El Instituto de Conservación Forestal (ICF), ha informado sobre la densa bruma que se ha instalado sobre la capital, atribuyéndola a un fenómeno atmosférico inusual.
Contrario a las especulaciones sobre la influencia de incendios forestales, los expertos señalan la falta de vientos, precipitaciones y altas temperaturas como los principales factores. Aunque se ha mencionado la incidencia de incendios, estos no serían la causa primaria de la bruma.
Los especialistas confían en que las lluvias previstas para finales de mayo ayudarán a disipar la capa de humo que cubre la capital y el suroeste del país. No obstante, advierten sobre la importancia de tomar precauciones ante esta situación, especialmente para personas con problemas respiratorios o cardiovasculares. Se recomienda limitar la exposición al aire libre y usar máscaras protectoras si es necesario.
Es relevante destacar que, aunque la bruma presenta un desafío para la calidad del aire y la salud pública, la situación en la capital no se compara con los problemas de contaminación en países como India y China. No obstante, se enfatiza la necesidad de estar alerta y seguir las recomendaciones de las autoridades para mitigar los efectos de este fenómeno atmosférico.
En resumen, aunque la densa bruma sobre la capital ha generado preocupación, los expertos señalan que las lluvias esperadas para finales de mayo podrían disiparla y mejorar la calidad del aire en la ciudad, contrarrestando así los efectos de las condiciones atmosféricas inusuales.

