En un paso firme hacia la reactivación del agro hondureño, el gobierno de la presidenta Xiomara Castro, a través de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), anunció la instalación de una planta procesadora de tomate en el municipio de Orica, Francisco Morazán.
Esta iniciativa, impulsada tras años de abandono al rubro por gobiernos anteriores, busca dinamizar la economía local, generar empleo y avanzar hacia la industrialización del campo.
Desde hace más de dos décadas, los productores de tomate de la zona no recibían un respaldo integral del Estado. Ahora, gracias al compromiso del gobierno del Partido Libertad y Refundación (LIBRE), se abre un nuevo capítulo para los agricultores agrupados en la Asociación de Productores de Tomate de Orica (Asoprot).
“Vamos por buen camino con los productores de Orica, esperando que sea una realidad la instalación de esta planta y que podamos generar desarrollo para la comunidad”, afirmó Mario Torres, titular de Agroextensión de la SAG.
La planta procesadora, cuyo costo se estima en unos 20 millones de lempiras, forma parte de una estrategia articulada entre instituciones públicas como el Programa Nacional de Agroextensión (PRONAGRO), el Instituto Nacional Agrario (INA), el Proyecto de Competitividad Rural de Honduras (ComRural), y el Banco Nacional de Desarrollo Agrícola (Banadesa).
El proyecto contempla la construcción de la planta, asistencia técnica, financiamiento, capacitación y asesoría legal para los productores. Con el objetivo de transformar la cadena de valor del tomate, tecnificar la producción y abrir mercados nacionales e internacionales para los pequeños agricultores.
“Esperamos que en dos meses tengamos listo el plan de negocios, que será clave para gestionar más apoyo, no solo con ComRural, sino también con banca privada y otros proyectos”, destacó Torres.
Durante una reciente reunión en la que participaron representantes del gobierno y productores de Asoprot, el viceministro de Agricultura, Roy Lazo, subrayó el compromiso del gobierno: “Estamos respondiendo a una necesidad histórica. El apoyo al agro en Orica estuvo olvidado por años. Hoy lo estamos retomando con seriedad”.
Por su parte, Marco Avilio García, secretario y representante legal de Asoprot, celebró la voluntad política: “El gobierno nos ha abierto las puertas. Esta es la esperanza que necesitábamos para salir adelante. Queremos comercializar nuestro tomate en más mercados y con mejor precio”.
Orica se perfila como un nuevo polo agroindustrial en el país, con una propuesta que reivindica el papel del productor como protagonista del desarrollo rural sostenible.

