Desde El Cairo y con un tono firme, el Rey Felipe VI ha sorprendido al mundo al denunciar públicamente el “brutal e inaceptable sufrimiento” que vive la población civil en Gaza, y defender la creación de un Estado palestino viable que pueda convivir en paz con Israel.

“Es insoportable lo que está ocurriendo”, afirmó el monarca durante su intervención frente al presidente egipcio Abdelfatah Al-Sisi, dejando claro que ni España ni Egipto pueden seguir siendo indiferentes ante la tragedia humana que atraviesa la Franja de Gaza.
Estas palabras no son solo un gesto protocolario. Se espera que Felipe VI repita este mismo discurso ante la Asamblea General de la ONU en los próximos días, en un momento en el que la presión internacional sobre Israel aumenta por los altos números de víctimas civiles y la devastación provocada por los ataques.
Aunque los discursos del rey se elaboran conjuntamente con Moncloa y Zarzuela, la contundencia de sus palabras sugiere un cambio de tono respecto a posiciones anteriores. Sin mencionar directamente a Israel, el mensaje fue claro y crítico, cuidando la diplomacia, pero sin dejar lugar a dudas sobre la postura de España: el sufrimiento gazatí es intolerable y urge una solución política basada en la creación de un Estado palestino.
“El sufrimiento en Gaza es brutal e inaceptable. Es urgente avanzar hacia un Estado palestino que conviva en paz y seguridad con Israel.” Rey Felipe VI.
Durante su estancia en Egipto, Felipe VI ha reforzado los lazos entre ambos países, participando en encuentros bilaterales de alto nivel, visitando monumentos históricos y abriendo el Foro Empresarial España-Egipto. Sin embargo, fue su intervención sobre Gaza lo que marcó el tono político del viaje.
El rey también reconoció y valoró el papel de mediador que Egipto está jugando en la región, intentando negociar un alto al fuego, facilitar ayuda humanitaria y lograr la liberación de rehenes. “No podemos ser ajenos a la realidad que nos rodea”, dijo, en una de las frases más comentadas de su discurso.
El respaldo abierto del Rey a la causa palestina no solo alinea a España con la mayoría de países del sur global, sino que representa una postura valiente en un escenario internacional donde muchos líderes aún evitan pronunciarse.
Ahora, todas las miradas estarán puestas en su próxima intervención ante la ONU, donde el jefe de Estado español podría elevar aún más el tono y colocar a España como un actor clave en la exigencia de una solución pacífica, justa y duradera al conflicto palestino-israelí.

