La organización La Vía Campesina de Honduras realizó este jueves una manifestación para condenar la «grave injerencia» y un «condicionamiento político» ejercido por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, antes y después de los comicios generales del 30 de noviembre.
El colectivo campesino señaló directamente al mandatario estadounidense de intentar manipular el clima electoral y afectar la intención de voto mediante mensajes que condicionaban las relaciones bilaterales.
Detalle de la acusación
La organización recordó que, días antes de las elecciones, el presidente Trump había asegurado públicamente que solo cooperaría con Honduras si resultaba ganador el candidato opositor del Partido Nacional, Nasry «Tito» Asfura.
Además, vinculó este apoyo al otorgamiento del indulto total al expresidente Juan Orlando Hernández, condenado en Estados Unidos por narcotráfico.
La Vía Campesina describe esta intervención como «descarada» y «sin precedentes», argumentando que favorece a actores políticos que históricamente han perjudicado los territorios campesinos.
Confusión Pos-electoral y crisis institucional
La denuncia de la organización se intensificó al día siguiente de las elecciones, cuando el portal oficial del sistema penitenciario estadounidense mostró al exmandatario Juan Orlando Hernández como «liberado». Este hecho, en plena disputa por los resultados electorales, generó «alarma, confusión y cuestionamientos» sobre el posible uso político de dicha información.
En este contexto, la organización agrícola advierte sobre la disputa en curso de los resultados, criticando la operación del Consejo Nacional Electoral (CNE). Según su escrito, el CNE se encuentra «manipulado y hackeado por el bipartidismo» (Partido Nacional y Liberal) y utiliza un sistema de transmisión, conocido como TREP, que consideran «no confiable para la población hondureña».
La Vía Campesina concluye que estos hechos constituyen una violación abierta a la soberanía de Honduras y un intento de moldear la percepción pública en un momento crítico para la nación.
«La soberanía nacional no puede ser utilizada como moneda de cambio ni instrumento de negociación imperial», sentencia el comunicado, que reafirma que la democracia hondureña atraviesa un momento decisivo.

